Como se sabe, tras un recorte de 25 puntos base la reunión de política monetaria de marzo, en una decisión unánime de su Junta de Gobierno el Banco de México dejó la tasa de referencia sin cambios en 11 por ciento en su anuncio de esta semana.
Lo que llamó la atención es que, además de la pausa, se anunció una revisión al alza en los pronósticos de inflación general y subyacente para los próximos seis trimestres y un retraso en la expectativa de convergencia a la meta de 3 por ciento del segundo al cuarto trimestre de 2025.