China es una potencia mundial tanto en telecomunicaciones cuánticas como en ordenadores cuánticos. En estas dos disciplinas es probablemente el único país que puede competir de tú a tú con EEUU. De hecho, buena parte de los hitos que han alcanzado los investigadores estadounidenses en el ámbito de la computación cuántica han sido conquistados también por los científicos chinos. La supremacía cuántica es uno de ellos, pero si desviamos nuestra mirada hacia las telecomunicaciones cuánticas la capacidad de China es estremecedora.