“Estoy buscando piso con dos amigos desde enero, pero es horrible la situación que tenemos. La crisis de la vivienda es monstruosa: antes era mucho más fácil alquilar un piso en Eivissa”, afirma a elDiario.es Félix, un pensionista de 78 años que vive desde diciembre del año pasado en el Servicio de Acogida Municipal (SAM), un recurso que depende de la Concejalía de Bienestar Social del Ajuntament d'Eivissa.
La exclusión social ligada a los precios desorbitados la vivienda...