España lidera la clasificación de países de la UE con mayor riesgo de que las personas adultas acaben en la pobreza pese a proceder de familias sin dificultades económicas y es el cuarto con mayor pobreza heredada en la adolescencia, según Eurostat.
Los datos sobre pobreza intergeneracional de la Oficina Estadística de la UE, señalan que hay una correlación entre la situación financiera del hogar de los padres y el riesgo de ser pobre al llegar a la edad adulta, pero esa asociación varía entre los países.