La tormenta solar inusualmente potente que azota la Tierra dejó intensos espectáculos de color en los cielos del hemisferio norte en la madrugada del sábado, sin que se hayan reportado, por el momento, problemas en el suministro de energía eléctrica o en las comunicaciones.
La Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA, por sus siglas en inglés) emitió una advertencia por tormenta geomagnética grave cuando una llamarada solar alcanzó el planeta la tarde del viernes, horas antes de lo anticipado.