Después de dos décadas de abandono, el complejo de Six Flags en Nueva Orleans, devastado por el huracán Katrina, se prepara para una transformación significativa. La demolición de las estructuras que una vez fueron un símbolo de diversión familiar marca el inicio de un nuevo capítulo para la ciudad.
El huracán Katrina, que azotó Nueva Orleans en 2005, dejó una huella imborrable en la ciudad, con un saldo trágico de 1,833 vidas perdidas y daños que ascendieron a 161 mil millones de dólares.