Taiwán cuenta con sólidas capacidades de aplicación de la ley y coopera con socios amigos en investigaciones criminales. Poder intercambiar información en tiempo real es crucial para combatir la delincuencia transnacional. Sin embargo, debido a su exclusión de la INTERPOL, Taiwán solo puede acceder a información crítica indirectamente. Cuando se recibe la información, a menudo está desactualizada, lo que crea una situación desafiante que permite que prospere la delincuencia transnacional y exacerbe los daños causados.