Desde la elección del 2 de junio, las principales variables financieras, como son el tipo de cambio y las tasas de interés de los bonos gubernamentales, han mostrado elevados niveles de volatilidad, reflejando una mayor percepción de riesgo hacia el país. Es importante aclarar que la reacción de los mercados no se explica por el triunfo electoral de Claudia Sheinbaum: ese ya estaba totalmente descontado por los mercados financieros, sin que ello causara ningún tipo de nerviosismo. De hecho, cuando...