Es difícil entender el comentario del presidente. Es entendible la necesidad de López Obrador de continuar asegurando que la situación de seguridad en el país mejoró, a pesar de la herencia que le dejó Felipe Calderón hace más de 12 años. Pero justificar su legado de “abrazos y no balazos” comentando que, aunque hay “más homicidios” pero “menos violencia”, simple y llanamente no ayuda a su candidata Claudia Sheinbaum. Ella y la candidata para jefa de Gobierno, Clara Brugada, son rehenes de los comentarios del presidente...