La primera frase de este artículo tiene que ser que estoy completamente en contra de que se cierre ningún medio, incluso sin que considere a ninguno de los mencionados medios de información. Estoy en contra de que se pudiera cerrar The Objective del mismo modo que estuve en contra de que se impidiera el acceso a RT. Pero estoy seguro de que los periodistas del libelo cogerán este titular para acusar al gobierno de iniciar la cacería contra los “medios hostiles” vía interpuesta a través de mis textos y hacerse las víctimas.