La entrada en vigor hoy en Florida de una nueva ley que prohíbe el aborto desde la sexta semana de embarazo oscurece aun mas el panorama de los derechos reproductivos en el sureste de EE.UU, aunque los floridanos tienen la posibilidad de cambiar las cosas mediante un referéndum en noviembre. "El sureste ya está experimentando una crisis de salud pública y prohibir el aborto en Florida solo empeorará la situación", señaló a EFE Lauren Brenzel, directora de campaña de Floridans Protecting Freedom.