Pedro Sánchez no ha logrado el apoyo internacional esperado tras la publicación de la carta en la que anunciaba su posible dimisión. Apenas se han manifestado jefes políticos internacionales empatizando con su causa y ninguno de los que lo ha hecho se corresponde con un líder de primera línea en un país occidental. La mayoría de estos mandatarios proceden de gobiernos socialistas sudamericanos. El presidente brasileño, Lula da Silva, es de los mandatarios que más ha mostrado su apoyo a Sánchez.