Blanca Suárez, a quien confundíamos hace unos días con la mismísima JLO, nos lo deja cada día más claro. La actriz es una apasionada de los tatuajes. La fiebre de la tinta que lo llaman en el gremio. Así, cuando ya habíamos perdido la cuenta de los tattoos que tenía, va y se hace uno nuevo. Suerte que cuida su piel, sus uñas y su pelo con unas potentes vitaminas mañaneras. De cualquier manera, todo hay que decirlo, el último tatuaje que la intérprete se ha hecho es probablemente uno de nuestros favoritos.