Desde septiembre de 2024, Ecuador sufre una grave crisis energética que se ha traducido en frecuentes apagones de hasta 14 horas diarias en varias provincias del país, a causa de la peor sequía en 60 años. Para enfrentar esta situación de emergencia, el presidente de la nación norteña, Daniel Noboa, gestionó en octubre la compra de electricidad a Colombia, medida que ha permitido una ligera reducción de los cortes de luz, al tiempo que impulsó la incorporación de la inversión privada en el área eléctrica, mediante la aprobación de una ley.